jueves, 18 de febrero de 2016

Amor preposicional
¿ A quién iba escribirle esta carta, si no es a
ti? Llorando me encontraba yo, ante el frío césped.
Bajo la lluvia otoñal, recordando estaba. Con
lágrimas en la mejilla, aprendí que no se puede
luchar contra lo inevitable. Pero apareciste tú. De
blanco venías, cual fresco aroma caramelizado.
Desde mi corazón te escribo: gracias. En serio.
Entre la espada y la pared yo estaba, solo y
desamparado. Y ahí estabas tú, llevando esa sonrisa
tan cálida. Mi alma, ahora serena, hacia a ti apunta,
arrinconando hasta la más oscura de mi pasada
melancolía. Todo esto que te escribo, es para que
nunca me olvides, para estar en lo más profundo de
tu corazón por siempre. Según tú, fue casualidad,
pero sin duda alguna, creo que mediante nuestro
destino, seremos felices durante el resto de los días.
Con amor, tu Nico.
                                   Nicolás Esteban

No hay comentarios:

Publicar un comentario